Ses Puntes es uno de los rincones más bellos del Puerto de Sóller pero al mismo tiempo uno de los mas desconocidos. Es un rincón de aconsejable visita tanto en verano como en invierno.
Como llegar a Ses Puntes.
Para iniciar esta breve excursión -ya que desde el Hotel Es Port se puede acceder a la a Ses Puntes en tan sólo 40 minutos- emprenderemos el trayecto en la avenida Onze de Maig situada justo enfrente de la salida de nuestro establecimiento.
Desde esta avenida se debe continuar hacia la derecha hasta abandonar el núcleo urbano, subiendo por una empinada cuesta que debemos seguir hasta una curva muy pronunciada desde donde tendremos que tomar el Camí de S’Illeta abandonando definitivamente la carretera principal. Una vez en este camino deberemos continuar nuestro ascenso entre olivares, pasaremos un zig-zag que hace la carretera junto a una antigua casa abandonada. Dos curvas más arriba en el lado izquierdo de la segunda veremos una gran barrera metálica con una pequeña escalera de piedra que nos permite el acceso al otro lado. Podremos ver que tanto a la derecha como a la izquierda hay un camino de tierra. En medio de estos dos, justo delante de las escaleras que hemos pasado, se abre entre la vegetación un sendero de fuerte pendiente. Si seguimos este antiguo camino de pescadores, siempre en línea recta, llegaremos hasta nuestro destino sin ningún problema.
- Vista de Ses Puntes
Que ver en ses Puntes.
Ses Puntes es una pequeña cala desconocida por los turistas. Es un lugar perfecto para darse un tranquilo remojo mientras se goza de un espectacular y virgen entorno. Sus fondos marinos, por su gran belleza, son perfectos para la práctica del buceo o snorkel. Además, es uno de los pocos lugares donde se puede realizar psicobloc (escalada sobre el mar) en la zona central de la Serra de Tramuntana.
El tramo final del camino de acceso a la cala es de gran belleza, es un antiguo camino empedrado usado por pescadores. A lo largo del trayecto se puede observar un antiguo horno de cal, algunas casetas de carboneros y, ya en la misma costa, los restos de una rampa con un “escar” para sacar y refugiar las barcas.
Este lugar es muy importante para la gente de Sóller. Fue donde desembarcaron los piratas turcos que en el año 1561 intentaron saquear el pueblo. Esta fiesta es conocida com “es Firó” donde año tras año se recrea este desembarco y batalla entre “moros y cristianos” en el Puerto y Sóller.
Notas importantes.
Al encontrarse relativamente cerca del núcleo urbano, la excursión a la Torre Picada no reviste ninguna dificultad aunque si se va en verano es conveniente ir previsto de agua, con buen calzado y evitar las horas centrales del día, siendo preferible ir por la mañana temprano o al atardecer. Ir en grupos pequeños, aconsejable 3 personas como mínimo, y siempre antes de nuestra salida avisar, tanto en la recepción del Hotel como a algún conocido, de las salidas que realicemos.